La Ribeira Sacra es una zona única por múltiples factores: por su gastronomía, su historia y cultura, sus tradiciones, su belleza, pero también por su flora y su fauna. Situada entre las provincias de Ourense y Lugo, la Ribeira Sacra debería de tener un tipo de clima atlántico continental. Pero también para eso es singuar. La zona de los Cañones del Sil presenta un especial microclima más típico del Mediterráneo. Gracia a ello, la cuenca del río Sil ofrece una gran biodiversidad.
En la Ribeira Sacra conviven especies autóctonas, como los robles, los tojos,las retamas... con otras más típicas de la cuenca del Mediterráneo como naranjos, olivos, encinas, madroños, lavanda, jara. En este sentido, algunos expertos destacan, también, la cantidad y calidad de las plantas medicinales y hierbas aromáticas como el hipérico, el orégano o la milenrana. Sin olvidar la variedad de frutos silvestres.
La fauna no es menos diversa. Algunas investigaciones acreditan la existencia de más de 160 especies de vertebrados diferentes. Jabalíes, zorros, conejos, corzos... pueblan los extensos bosques de la Ribeira Sacra en los que se esconden las joyas del románico. Aves rapaces, águilas, milanos negros, patos y garzas destacan en el cielo de los Cañones del Sil, cuyas augas surcan carpas, truchas y otras especies.
Esta semana hemos podido ver a una de esas otras especies que vive en el río Sil. Una nutria de singular belleza. Las nutrias de río presentan un pelaje impermeable que le permite conservar el calor de su cuerpo, ya que pasan gran parte del tiempo bajo el agua. Son conocidas por sus habilidades como nadadoras y por su velocidad, pudiendo llegar a alcanzar los 12 kilómetros por hora.
Una de las diferencias entre las nutrias de rio y las tropicales, típicas de Asia y África, es que las primeras se alimentan de peces pequeños, ranas y otras especies acuáticas que pescan con la boca.
Como demuestran las fotos, no es complicado ver como la nutrias forman parte de la fauna de la Ribeira Sacra.